Seleccione el material correcto
Elija fibras duraderas: algunas fibras son más propensas a la pillada que otras. Opta por fibras más duraderas como lana, mezclas de cachemira o fibras sintéticas como acrílico o nylon, que tienden a resistir la pilso mejor que las fibras delicadas y naturales como la lana sola.
Merino Wool: conocida por ser más suave y más resistente a la pillada.
Mezclas de cachemir: aunque las mezclas de cachemira con nylon o seda pueden ofrecer una mejor durabilidad que la cachemira pura.
Evite las fibras sintéticas de baja calidad: mientras que las fibras sintéticas pueden ser más duraderas, el acrílico o el poliéster de baja calidad puede causar más pilling con el tiempo, especialmente cuando se frotan con frecuencia las superficies.
Elija el punto y el hilo correcto
Knits más apretados: una estructura más unida ayudará a mantener las fibras en su lugar y reducir la probabilidad de pilling. Los cárdigans unidos son más propensos a la pelusa y la pilling, especialmente en áreas de alta fricción.
Hilos lisos: los hilos con un acabado suave, como los hechos de seda o lana fina, tienen menos fibras sueltas que tienen más probabilidades de formar píldoras. Evite los hilos que tienen muchas fibras cortas o sobresalientes, que pueden atrapar y formar píldoras.
Hilos mezclados: Considere las mezclas de hilos, como lana merino mezclada con seda, que ofrecen la suavidad y el calor de las fibras naturales pero con una mayor durabilidad y una píldora reducida.
Lavar con cuidado
Lavado a mano o ciclo suave: lavar en un ciclo suave con agua fría puede reducir la fricción entre las fibras, lo que ayuda a minimizar la pilamento. El lavado de manos es aún más suave.
Use una bolsa de malla: si lava la máquina, coloque el cárdigan en una bolsa de lavado de malla para protegerla de la fricción excesiva contra otras prendas, particularmente telas ásperas como el denim.
Use detergentes suaves: los detergentes duros pueden descomponer las fibras y hacerlas más susceptibles a la pillada. Use detergentes suaves formulados específicamente para delicados o prendas de lana.
Evite los suavizantes de tela: los suavizantes de telas pueden cubrir las fibras y hacerlas más débiles, lo que puede aumentar la pilling. Es mejor evitar usarlos en cárdigans tejidos.
Seco al aire: evite la secadora, ya que la acción de volteo puede causar fricción excesiva y conducir a más pilling. Coloque el cárdigan plano para que se seque o cuelgue en un área bien ventilada.
Almacenar correctamente
Evite colgar: colgar un cárdigan puede estirar las fibras y hacer que se debiliten, lo que puede contribuir a la pilling. Dobla el cárdigan con cuidado y guárdelo en un cajón o en un estante para minimizar la fricción.
Use bolsas de tela para el almacenamiento: si se almacena durante mucho tiempo, mantenga el cárdigan en una bolsa de prenda transpirable para evitar que se frote contra otras prendas y desarrolle pelucas o pilling.
Proteja de la humedad: guarde su cárdigan en un lugar seco y fresco para evitar que las fibras se debiliten por la humedad, lo que puede hacer que sean más propensas a la pillada.
Evitar la fricción
Límite de contacto con superficies rugosas: dado que la pilling a menudo ocurre en áreas de alta fricción (por ejemplo, axilas, mangas), tenga en cuenta el uso del cárdigan cerca de superficies ásperas, como mochilas, cinturones de seguridad o respaldos. Estas áreas causan más desgaste en la tela.
Gire sus prendas: para evitar fricción excesiva en cualquier área, intente rotar el cárdigan con otras prendas similares, para que las áreas que experimenten la mayor fricción no se desgasten tan rápido.
Use las afeitadores de tela y las herramientas de pilas
Avances de tela: se puede usar una rasuradora de tela o un removedor de pelusa para eliminar cuidadosamente las píldoras a medida que se forman. Asegúrese de seguir las instrucciones y no presionar demasiado sobre telas delicadas.
Cepillos de pilling: se puede usar un cepillo suave para pisotear para cepillar cuidadosamente pequeñas píldoras o peluches. Úselo ligeramente para evitar dañar la tela.
Herramientas de tipo velcro: algunas herramientas diseñadas específicamente para eliminar la pelusa de las telas delicadas pueden ser una buena inversión. Estas herramientas funcionan levantando suavemente las píldoras sin dañar las fibras.
Reforzar las áreas de alta fricción
Costeros reforzados: algunos cárdigans de punto están diseñados con costuras reforzadas en áreas que son más propensas a la fricción, como las axilas o los codos, para minimizar el desgaste.
Capas o subyacentes: considere colocar una capa interna delgada y suave debajo de su cárdigan para reducir la cantidad de fricción directamente en la ropa de punto. Esto puede ayudar a minimizar la formación de píldoras en las áreas de alta fricción.
Use prendas de protección: para las personas que usan cárdigans sobre materiales ásperos (como mochilas o cinturones), el uso de una capa protectora delgada (como una camisa o una camiseta sin mangas) debajo del cárdigan puede reducir la fricción.
Mantenimiento regular
Píldoras: si nota que se forman píldoras, recorte suavemente con un par de tijeras o use una rasuradora de tela. Esto evitará que las píldoras se acumulen y causen más daño a la tela.
Inspeccione regularmente: haga que sea un hábito verificar áreas de alta fricción como axilas, puños y los lados de las mangas. La intervención temprana puede evitar que se extienda la pillada por todo el cárdigan.
Evite el lavado en exceso
Lave con menos frecuencia: una de las mejores maneras de reducir la pillada es lavar los cárdigans de punto con menos frecuencia. Lavarse con demasiada frecuencia puede hacer que las fibras se descompongan, lo que conduce a peluscos y pilas. Clepar o aire sale de la prenda en su lugar cuando no esté muy sucia.
Gire entre prendas: déle a su cárdigan un descanso del uso frecuente. Rotar entre varias prendas similares reducirá la fricción general y el estrés colocado en cualquiera. 3